Preguntas frecuentes

Como trabajador tienes una serie de derechos laborales reconocidos por la legislación, algunos de los cuales son los siguientes:

1. Derecho a un contrato de trabajo por escrito que recoja las condiciones laborales pactadas.
2. Derecho a una jornada máxima de trabajo y a descansos remunerados.
3. Derecho a una remuneración mínima establecida por ley y a recibir el salario en el plazo y forma establecidos.
4. Derecho a la igualdad de trato y no discriminación por razón de género, edad, orientación sexual, discapacidad, religión, etc.
5. Derecho a la protección de la salud y seguridad en el trabajo.
6. Derecho a la formación profesional y a la promoción y desarrollo en el empleo.
7. Derecho a la negociación colectiva y a la libertad sindical.

Estos son solo algunos de los derechos laborales más importantes, pero existen muchos otros reconocidos por la ley. En caso de duda o vulneración de los mismos, es recomendable acudir a un abogado laboralista para recibir asesoramiento y proteger tus derechos.

Como trabajador, tu empleador tiene una serie de obligaciones hacia ti, que incluyen:

1. Pagar tu salario de acuerdo con lo establecido en tu contrato laboral y las leyes aplicables.
2. Proporcionar un ambiente de trabajo seguro y saludable.
3. Proporcionar los equipos y herramientas necesarios para llevar a cabo tu trabajo.
4. Pagar las contribuciones a la seguridad social y otros impuestos correspondientes.
5. Respetar tus derechos laborales, incluyendo la igualdad de trato y no discriminación, la libertad sindical, y la protección contra el acoso y la violencia laboral.
6. Cumplir con las obligaciones de seguridad y salud en el trabajo, incluyendo la prevención de accidentes y enfermedades profesionales.
7. Proporcionar información y formación sobre los riesgos laborales, así como medidas preventivas y de protección adecuadas.
8. Respetar los plazos de descanso y vacaciones establecidos por ley o por el convenio colectivo aplicable.
9. Proporcionar las prestaciones sociales y de seguridad social correspondientes.

Si crees que tu empleador no está cumpliendo con estas obligaciones, es importante que busques asesoramiento de un abogado laboralista para saber cómo puedes hacer valer tus derechos.

Si tienes un conflicto laboral con tu empleador, es recomendable que trates de resolverlo en primer lugar por la vía del diálogo y la negociación. Si no se llega a un acuerdo, puedes acudir a las siguientes instancias:

1. Conciliación: puedes acudir al servicio de mediación, arbitraje y conciliación (SMAC) para intentar llegar a un acuerdo con tu empleador.
2. Reclamación ante la Inspección de Trabajo: puedes presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social si consideras que tu empleador está incumpliendo alguna normativa laboral.
3. Demandar ante los tribunales: si no se llega a un acuerdo en la conciliación y la Inspección de Trabajo no puede resolver el conflicto, puedes presentar una demanda ante los tribunales laborales.

Es importante que antes de tomar cualquier decisión, consultes con un abogado laboralista que pueda asesorarte y ayudarte en todo el proceso.

No, en España el despido debe estar justificado por alguna de las causas previstas en la ley, como causas económicas, técnicas, organizativas o de producción. Además, la empresa debe seguir un procedimiento legal para llevar a cabo el despido, que incluye la notificación por escrito al trabajador y la posibilidad de presentar una reclamación ante el Servicio de Mediación, Arbitraje y Conciliación (SMAC) o acudir a los tribunales laborales. Si el despido no está justificado o no se sigue el procedimiento legal correspondiente, se puede considerar como despido improcedente y el trabajador tendrá derecho a una indemnización o a la readmisión en el puesto de trabajo.

En España, la reclamación de una indemnización por despido dependerá del tipo de despido y de las circunstancias específicas de cada caso. En general, si consideras que has sido despedido de manera injustificada o improcedente, puedes presentar una demanda ante el Juzgado de lo Social reclamando la correspondiente indemnización por despido.

Para ello, es recomendable que busques el asesoramiento de un abogado laboralista, quien te guiará en todo el proceso y te asistirá en la presentación de la demanda ante el juzgado. Es importante que tengas en cuenta que el plazo para presentar la demanda es de 20 días hábiles desde la fecha del despido, por lo que es importante actuar con rapidez.

En caso de que el despido haya sido declarado nulo por vulneración de derechos fundamentales, el trabajador tendrá derecho a ser readmitido en su puesto de trabajo, así como a percibir una indemnización equivalente a la que correspondería en caso de despido improcedente.

En resumen, si crees que has sido despedido injustamente, lo recomendable es buscar el asesoramiento de un abogado laboralista para que te guíe en todo el proceso de reclamación de indemnización por despido.

Un despido improcedente es aquel que se produce sin causa justificada o sin respetar los procedimientos establecidos por la ley. Es decir, es un despido que no cumple con las normas laborales que regulan la terminación del contrato de trabajo.

En España, un despido se considera improcedente cuando no se ajusta a una de las siguientes causas establecidas por la ley: disciplinarias, objetivas o colectivas.

Si consideras que tu despido ha sido improcedente, puedes reclamarlo ante los tribunales laborales en un plazo de 20 días hábiles desde la fecha en que se produjo el despido.

Para reclamar un despido improcedente, es recomendable que sigas estos pasos:

1. Recopila toda la documentación relacionada con el despido, como la carta de despido, el contrato laboral, las nóminas, etc.
2. Consulta a un abogado especializado en derecho laboral que te asesore sobre el proceso de reclamación y las posibilidades de éxito.
3. Presenta la demanda ante los tribunales laborales en un plazo de 20 días hábiles desde la fecha del despido. En la demanda, deberás explicar las razones por las que consideras que el despido ha sido improcedente y aportar la documentación que lo demuestre.
4. Si el tribunal declara el despido improcedente, podrás solicitar la readmisión en la empresa o una indemnización por despido improcedente. Si optas por la indemnización, esta deberá ser abonada por la empresa en un plazo de cinco días hábiles desde la notificación de la sentencia.

En cualquier caso, es importante que consultes a un abogado especializado en derecho laboral para que te asesore en todo el proceso de reclamación y defienda tus intereses ante los tribunales.

Un accidente laboral es aquel que se produce durante el desempeño de una actividad laboral y que causa una lesión o enfermedad al trabajador. En España, los accidentes laborales están regulados por la Ley de Prevención de Riesgos Laborales y la Seguridad Social, y tienen derecho a una compensación los trabajadores que sufren un accidente durante el desempeño de su trabajo.

Si has sufrido un accidente laboral, estos son los pasos que debes seguir para reclamar una compensación:

1. Informa a tu empresa: Es importante que informes a tu empresa del accidente y que se registre en el libro de incidencias.
2. Acude al médico: Debes acudir a un médico lo antes posible para que te examine y determine el alcance de tus lesiones o enfermedades.
3. Notifica el accidente a la Seguridad Social: La empresa tiene la obligación de notificar el accidente a la Seguridad Social, pero también puedes hacerlo tú mismo si no lo ha hecho la empresa.
4. Presenta la solicitud de prestación: Debes presentar una solicitud de prestación ante la Seguridad Social, en la que se incluirán los partes médicos y toda la documentación que justifique la lesión o enfermedad.
5. Consulta a un abogado especializado en derecho laboral: Si consideras que la compensación que te ofrece la Seguridad Social no es suficiente, puedes consultar a un abogado especializado en derecho laboral para que te asesore sobre las posibilidades de reclamación de una indemnización adicional.

Es importante que actúes con rapidez y que cumplas con los plazos establecidos por la ley para reclamar la compensación correspondiente por un accidente laboral. En caso de que tengas alguna duda, es recomendable que consultes con un abogado especializado en derecho laboral para que te asesore sobre tu caso concreto.

Un ERE (Expediente de Regulación de Empleo) es un procedimiento que una empresa puede utilizar para despedir a un grupo de trabajadores o para modificar sustancialmente las condiciones laborales de los mismos. Un ERE puede ser de varios tipos, como un despido colectivo, una suspensión temporal de empleo o una reducción de jornada.

Como trabajador, un ERE puede afectarte de diversas formas, dependiendo del tipo de ERE que se esté aplicando y de tu situación laboral. En el caso de un despido colectivo, podrías perder tu trabajo si la empresa considera que no puede mantener la plantilla actual debido a razones económicas, técnicas, organizativas o de producción.

En el caso de una suspensión temporal de empleo, también conocida como ERTE (Expediente de Regulación Temporal de Empleo), tu contrato laboral se suspende temporalmente, pero mantienes tu empleo y puedes ser llamado de nuevo a trabajar una vez que se reanuden las actividades de la empresa. Durante el período de suspensión, podrías tener derecho a percibir una prestación por desempleo.

En cualquier caso, si te ves afectado por un ERE, es importante que conozcas tus derechos y que te asesores con un abogado laboralista para determinar si se han respetado los procedimientos legales y si te corresponden indemnizaciones o prestaciones por desempleo.

Ante un ERE, lo primero que debes hacer como trabajador es informarte adecuadamente sobre el proceso y las posibles implicaciones para tu situación laboral. Para ello, es importante que te mantengas informado sobre las decisiones que tome la empresa y que consultes con representantes sindicales o abogados laboralistas para que te asesoren.

Además, es importante que tengas en cuenta los siguientes pasos:

1. Revisa tu contrato laboral y los acuerdos colectivos para conocer tus derechos en caso de un ERE.
2. Si la empresa te comunica formalmente que serás afectado por un ERE, pide una explicación clara y detallada de las causas y las medidas que se van a tomar.
3. Si tienes derecho a indemnización o a prestaciones por desempleo, asegúrate de que te las concedan correctamente y en el plazo establecido por ley.
4. Si consideras que tus derechos no están siendo respetados o que la empresa está actuando de forma irregular, contacta con un abogado laboralista para que te asesore y te represente en caso de ser necesario.
5. En caso de que se trate de un despido colectivo, participa activamente en el proceso de negociación y consulta con los representantes sindicales y la empresa.

En cualquier caso, es importante que mantengas una actitud positiva y proactiva para proteger tus derechos y defender tus intereses laborales.

Para solicitar una prestación por desempleo, debes seguir los siguientes pasos:

1. Reúne la documentación necesaria. Para solicitar la prestación por desempleo, necesitarás tu DNI o NIE, la tarjeta de la Seguridad Social, el certificado de empresa si has sido despedido, y cualquier otro documento que se te solicite en función de tu situación laboral.
2. Regístrate como demandante de empleo. Para poder solicitar la prestación por desempleo, debes estar registrado como demandante de empleo en tu oficina de empleo local.
3. Solicita la prestación. Puedes solicitar la prestación por desempleo de forma presencial en tu oficina de empleo o a través de la sede electrónica del Servicio Público de Empleo Estatal (SEPE). Deberás completar el formulario de solicitud, adjuntar la documentación requerida y enviar la solicitud.
4. Espera a recibir la respuesta. El SEPE procesará tu solicitud y te enviará una respuesta en un plazo máximo de 15 días. Si se te concede la prestación, recibirás el primer pago en un plazo de unos 10 días hábiles a partir de la fecha en que se aprobó la prestación.
5. Cumple con las obligaciones. Para seguir recibiendo la prestación, deberás cumplir con una serie de obligaciones, como mantener actualizados tus datos personales y laborales, renovar la demanda de empleo y demostrar que estás buscando activamente trabajo.

Es importante que te asegures de cumplir con todos los requisitos y plazos para solicitar y mantener la prestación por desempleo, y que contactes con el SEPE o con un abogado laboralista si tienes dudas o necesitas más información.

El acoso laboral, también conocido como mobbing, se define en España como una situación en la que se ejerce de forma repetida y prolongada sobre una persona, un comportamiento hostil o degradante que tenga como objetivo intimidar, humillar o desestabilizar al trabajador en su entorno laboral. Este comportamiento puede ser llevado a cabo por una o varias personas, y puede adoptar diversas formas, como insultos, amenazas, aislamiento, asignación de tareas inferiores a las capacidades del trabajador, cambios frecuentes e injustificados en las condiciones de trabajo, etc.

El acoso laboral se considera un tipo de violencia en el ámbito laboral y está recogido en la Ley de Prevención de Riesgos Laborales. La ley establece la obligación del empresario de proteger la integridad física y psicológica de los trabajadores, y de tomar medidas preventivas para evitar el acoso laboral en el lugar de trabajo. Además, el acoso laboral está tipificado como una infracción grave en la normativa laboral, y puede dar lugar a sanciones para la empresa y responsabilidades civiles y penales para los acosadores.

Si estás sufriendo acoso laboral en España, es importante que tomes medidas para protegerte y denunciar esta situación. Estos son los pasos que puedes seguir para denunciar el acoso laboral en España:

1. Recopila pruebas: Es importante que reúnas todas las pruebas posibles que demuestren el acoso laboral, como correos electrónicos, mensajes de texto, grabaciones, testimonios de testigos, etc. Estas pruebas serán fundamentales para demostrar tu caso.
2. Habla con tu empresa: Es recomendable que hables con tu empresa y les informes de la situación de acoso que estás sufriendo. Puedes hacerlo mediante una reunión con tu jefe directo, con el departamento de recursos humanos o con el delegado de prevención de riesgos laborales. La empresa tiene la obligación de tomar medidas para protegerte y evitar el acoso laboral.
3. Denuncia ante la Inspección de Trabajo: Si la empresa no toma medidas o si consideras que no son suficientes, puedes presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo. Esta entidad se encarga de investigar las situaciones de acoso laboral y puede sancionar a la empresa si no ha tomado medidas para evitar el acoso.
4. Denuncia ante la Fiscalía: Si el acoso laboral incluye amenazas, coacciones o agresiones, también puedes denunciar ante la Fiscalía por delito de acoso laboral.
5. Contacta con un abogado: Si decides denunciar el acoso laboral, es recomendable que te pongas en contacto con un abogado especializado en derecho laboral. El abogado podrá asesorarte y representarte en el proceso de denuncia.

Recuerda que el acoso laboral es un problema grave que puede afectar gravemente a tu salud física y psicológica, por lo que es importante que tomes medidas para protegerte y denunciar esta situación.

Si tu empleador no te paga el salario que te corresponde, lo primero que debes hacer es intentar solucionar la situación de manera amistosa, hablando directamente con tu empleador. En muchos casos, se trata de un simple error administrativo o un retraso en el pago. Si después de hablar con tu empleador no se resuelve la situación, puedes tomar las siguientes medidas:

1. Presentar una reclamación ante la empresa: puedes enviar un correo electrónico o una carta formal reclamando el pago del salario adeudado. Es importante que incluyas la cantidad exacta que se te adeuda y la fecha en que se realizó el trabajo.
2. Presentar una denuncia ante el Juzgado de lo Social: en caso de que no se haya llegado a un acuerdo, puedes presentar una demanda ante el Juzgado de lo Social correspondiente. Para ello, es necesario que cuentes con un abogado laboralista que te asesore y te represente durante el proceso.
3. Acudir a una inspección de trabajo: también puedes presentar una denuncia ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, que se encargará de investigar y comprobar la situación y tomar medidas para solucionarla.

Es importante que conserves todas las pruebas que puedan demostrar que se te adeuda el salario, como por ejemplo los recibos de nómina o los contratos de trabajo.

En España, los trabajadores tienen derecho a solicitar una reducción de jornada laboral por diversas razones, como el cuidado de hijos, de personas mayores o con discapacidad, o para hacer cursos de formación. También pueden solicitar un horario flexible si su situación personal o familiar lo requiere.

Para poder solicitar una reducción de jornada o un horario flexible, el trabajador debe cumplir con ciertos requisitos y seguir un proceso establecido por la empresa. Es recomendable que consultes con un abogado laboralista para que te informe sobre tus derechos y te ayude a negociar con tu empleador en caso de que sea necesario.

Las vacaciones laborales son un derecho reconocido en España para los trabajadores y se consideran un periodo de descanso retribuido. El trabajador tiene derecho a un mínimo de 30 días naturales de vacaciones al año, que se pueden fraccionar en periodos más cortos según lo que establezca el convenio colectivo o el acuerdo entre el trabajador y la empresa.

Para solicitar las vacaciones, el trabajador debe comunicarlo a su empleador con la antelación que se haya establecido en el convenio colectivo o en el contrato de trabajo. En general, la comunicación se realiza con un formulario específico que la empresa debe proporcionar al trabajador.

Es importante tener en cuenta que el derecho a las vacaciones no se puede renunciar, aunque se puede acordar con el empleador el disfrute de las mismas en otro momento diferente al establecido. En caso de que el trabajador no haya podido disfrutar de sus vacaciones durante el año correspondiente, estas se acumularán para el siguiente periodo.

Es recomendable revisar el convenio colectivo aplicable o consultar con un abogado laboralista para conocer con detalle las normas y procedimientos específicos de la empresa en la que se trabaja.

Como trabajador extranjero en España, tienes los mismos derechos laborales que los trabajadores nacionales. Estos derechos se establecen en el Estatuto de los Trabajadores y en los convenios colectivos aplicables en cada sector.

Algunos de los derechos laborales que tienes como trabajador extranjero en España son:

1. Derecho a un contrato de trabajo por escrito que especifique el tipo de contrato, la duración, el salario, las horas de trabajo, las vacaciones y otros aspectos relevantes.
2. Derecho a un salario igual al de los trabajadores nacionales que realicen el mismo trabajo en las mismas condiciones.
3. Derecho a una jornada laboral máxima de 40 horas semanales.
4. Derecho a 30 días naturales de vacaciones al año.
5. Derecho a un permiso retribuido por enfermedad o accidente laboral.
6. Derecho a un permiso por maternidad o paternidad.
7. Derecho a la seguridad y la salud en el trabajo, incluyendo el derecho a recibir formación en materia de prevención de riesgos laborales.
8. Derecho a sindicarse y a afiliarse a un sindicato.
9. Derecho a la protección contra la discriminación por motivos de género, edad, orientación sexual, origen étnico o nacionalidad.

Es importante destacar que, como trabajador extranjero en España, también tienes la obligación de cumplir con las normativas laborales y fiscales españolas, como pagar impuestos y cotizar a la Seguridad Social.